Armando Zarlenga, acusado de haber atropellado a dos motociclistas que perdieron la vida, quedó más cerca de ser enjuiciado. Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que el caso se cierre a través de un acuerdo entre las partes. Esa es la conclusión más importante a la que se arribó una audiencia que tuvo una duración de 12 horas.

El 25 de abril, Zarlenga le causó la muerte a Maximiliano Saldaño y a Joaquín Franck Colombres al embestir su camioneta con la moto en la que se trasladaban las víctimas por avenida Mate de Luna. Los estudios realizados al acusado dieron cuenta de que conducía alcoholizado. Zarlenga está detenido desde la fecha del percance, aunque con la modalidad de arresto domiciliario.

El lunes pasado, el juez Gonzalo Ortega había instado a las partes a que buscaran una solución alternativa, ya que los defensores del joven, Camilo Atim y Ernesto Baaclini, habían realizado un nuevo ofrecimiento para llegar a un acuerdo. El imputado se declararía culpable, recibiría una pena de tres años condicional y pagaría una indemnización de $18 millones a los familiares de cada una de las víctimas. “Tal como lo había solicitado, se realizó una reunión entre todas las partes, pero no hubo acuerdo”, explicó el fiscal Pedro Gallo. “Por eso le solicitó que continuemos con el proceso, lo que no significa que en el transcurso de los días se realice el acuerdo”, advirtió el representante del Ministerio Público Fiscal.

Fuentes judiciales informaron que al menos dos de los querellantes podrían estar interesados en pactar, pero habrá que esperar cuáles son los pasos que darán.

Audiencia

Ayer, minutos después de las 8, comenzó la audiencia de formulación de cargos y admisibilidad de las pruebas. Se trata de un debate en que todas las partes definen cuál será la acusación con la que llegará al juicio oral.

En este caso no hubo acuerdo entre las partes. Gallo indicó que lo acusa de homicidio culposo por la conducción imprudente y antirreglamentaria de una camioneta, triplemente agravado por la pluralidad de víctimas, por nivel de alcoholemia superior a un gramo por litro de sangre y por exceso de velocidad de más de 30 kilómetros por encima de la máxima permitida. Anunció también que solicitará una pena de cinco años (la máxima es de seis).

Los querellantes Jorge Lobo Aragón y Federico Iramain, que representan a la madre y al padre de Franck Morales, y Humberto Domingo Castaldo, que atiende los derechos de la familia Saldaño, no compartieron la opinión del fiscal y solicitaron que sea enjuiciado por homicidio culposo con dolo eventual y anticiparon que solicitará que se le dicte una pena de 12 años.

Los defensores, en cambio, plantearon que la acusación debería ser una y que tendrían que ser rechazadas las pretensiones de los querellantes. El juez rechazó el pedido.

En el debate también se definió que serán al menos 40 los testigos que desfilarán por el juicio que no tiene fecha de realización. Ni siquiera se sabe si será este año. Por lo pronto, hasta el sábado 5, Zarlenga enfrentará otra audiencia. Debe definirse si continuará privado de su libertad.